domingo, diciembre 09, 2007

Personal Fest 2007: El rock arriba.

No partamos de la base. Ni Chris Cornell tocó “Pretty noose” ni los Happy Mondays hicieron “24 hour party people”. Y la verdad, no me importó. Lo que me dejó mi primera visita al Personal Fest fue eso, que el rock esta únicamente arriba del escenario, nada de ritos, aguante, mística rockera,cero idiosincrasia,apenas había barro, y era un barro dudoso, al lado de los arbolitos, lejos de los baños químicos.
Si algo me interesaba de esta edición del festival (más allá de los nombres que cerraban la segunda noche) era que se alejaba un poco de los grupos medio bizarros de las anteriores. New order, Duran Duran, Pet shop boys tiraban más a las cabezas enfrascadas de futurama o las casas del recuerdo de Mundo Marino, no sumaban para más que la a veces miserable nostalgia. Pero este año vislumbró con visitas realmente esperadas: por un lado Snoop doog, que dio a muchos gangstas locales la oportunidad de ver a una estrella, verdadera estrella, antes que la tiroteen, Coco rosie, dos nenitas que traen cosas bastante interesantes y audibles, lo que no es poco y los noruegos de datarock.
Cuando llegó el mensaje salvador el viernes, se me presentó la oportunidad de ver a una banda que siempre me gustó y que creo, nunca había estado en nuestro páis: Happy Mondays. Los no tan chicos de Manchester llegaron con su formación original: los hermanos Shaun y Paul ryder, el inentendible “Bez” y la cantante Rowetta satchett, que robó escena. Desde el arranque con “Come on and say yes”, “Loose fit”, “Judge Fudge” y “Kinky afro” hasta el final con “Hallellujah” nos dio a todos el show que queriamos. El amado Madchester en B.A. Desde debajo del escenario: 100% Personal Fest, gente que no entendia mucho lo que estaba viendo pero igual bailaba. ¿Tony Wilson?, ¿Inspiral Carpets?. Mientras tanto en la entrada del Club Ciudad de Buenos Aires alguien disfrazado de el Marquez de Sade pedía que le regalaran una peluca azul.
Antes, Luis Alberto presentó un set preciso como siempre, con Nerina Nicotra en bajo, Claudio Cardone en teclados y Sergio Verdinelli en batería. El show de el flaco estuvo basado en su último disco “Pan” con temas como “Cabecita Cabecita” mas algunas otras joyitas como “Seguir viviendo sin tu amor”, “Miro tu amor” y el infaltable “Ana no duerme” acompañado por sus hijos Dante y Valentino. En simultáneo con los Happy Mondays tocó Fito Páez en plan “Rodolfo”, o sea solo con el piano. Pero de este show solo llegue a los bises “Mariposa technicolor” y “Desarma y sangra” de Seru giran, este último era lo que yo buscaba en ese recital.
Y lo de Chris Cornell…dios mio, no debe haber muchos que puedan cantar tanto y tan fuerte. “Esta es mi primera vez en la Argentina porque las bandas con las que solía tocar no querían salir de gira o estaban cansadas…..”. Palito. El show del autor de la frase estuvo lejos del medio tempo de Audioslave y de la tranquilidad de su último disco solista “Carry on”, estuvo más cerca de Soundgarden, entonces no es casual que el segundo de la lista fuera “Outshined” (había arrancado con “Let me drown”) y le siguieron “Rusty cage”, “Black hole sun, “Spoonman” mas joyitas del disco de Temple of the dog (banda paralela que Cornell armara junto a parte de los pearl jam) y de Euphoria morning, su primer disco solista. En el show, con un Cornell con toda la onda, no faltaron algunos momentos de su asociación con los ex R.A.T.M como “Like a stone”, “Be yourself” y el increíble “Cochise”. En fin la oportunidad de ver a uno de los dos o tres mejores cantantes de los años noventa cumplida. Nunca espere tanto rock en el festival personal, y eso que no me quede a ver 2 Unlimited.


1 comentario:

Anónimo dijo...

yo consegui las entradas gratis, para ver todo eso, aunque vi a Fito, y no a los Happy...sensible, al final soy un negro sensible...